La evolución en la especie humana va de la mano de Índigos y Cristales en razón del desarrollo espiritual alcanzado por ellos en vidas anteriores.
Son, en especial, los nuevos niños los que están aquí para mostrarnos el camino, pero todo aquel que trabaje el amor y la consciencia espiritual puede llegar a la vibración índigo/cristal ya que la nueva era está invitando, de alguna manera, a la Humanidad a lograrlo.
Los que primero llegaron fueron los Índigo que nacieron durante el siglo pasado, sobre todo después de la Segunda Guerra Mundial, y ya están bien entrados en su adultez hoy en día. Fueron los pioneros, la fuerza de choque encargada de romper todas las estructuras conocidas en lo mental, social, científico, cultural, etc. para dar el salto de conciencia requerido en la Era de Acuario. Sin embargo, en los 80's llegó una nueva gran ola de Índigos y así es como tenemos una generación completa que está ahora entre los veinte y treinta años.
Se los llamó Índigo porque tienen mucho azul índigo en sus auras. Este color es el que corresponde al chakra del tercer ojo, centro de energía localizado a la altura de las cejas que regula la clarividencia, o la habilidad para ver más allá de las formas como la energía, visiones y espíritus.
La oleada más importante de niños Cristal se dio en el planeta aproximadamente en el 2000, pero hay muchos que llegaron unos cuantos años antes. Estos son seres extremadamente psíquicos y sensibles cuyo propósito principal es revelarnos nuestro poder interno y nuestra divinidad.
Tienen despierta su conciencia crística, de Cristo o “Cristal” de ahí el nombre con el que se los reconoce. Funcionan como una conciencia grupal en lugar de como individuos, ya que viven por la "Ley del Uno" o Conciencia de Unidad, constituyendo una poderosa fuerza para el amor y la paz del planeta.
Existen Adultos Índigo que ahora están haciendo su transición a Cristal están experimentando una transformación eso significa que todos nosotros tenemos el potencial de ser parte del floreciente grupo de "ángeles humanos".
La diferencia principal entre Índigos y Cristales es su temperamento.
Los Índigo tienen un espíritu guerrero debido a que su propósito colectivo es hacer desaparecer todo lo que ya no nos sirve más. Están aquí para anular los sistemas gubernamentales, educativos y legales que carecen de integridad. Para lograr esto se requiere de fuerte temperamento y determinación.
Los adultos que se resisten al cambio suelen malinterpretar a los Índigo y etiquetarlos con diagnósticos psiquiátricos para medicarlos haciéndoles perder, lamentablemente y con frecuencia su maravillosa sensibilidad, sus dones espirituales y su energía guerrera...
En contraste, los niños Cristal son felices y de temperamento estable. Pueden tener sus rabietas ocasionales, pero son especialmente misericordiosos y tranquilos. Sus auras son cambiantes pero con hermosos tonos pasteles multicolores. Tienen fascinación por las rocas y los cristales.
Es muy importante la interacción de unos con otros ya que permitirá que, desde una base más libre de esquemas y formas preestablecidas, se realicen las tareas de evolución y aprendizaje en un marco de amor infinito, mucho más palpable y fluido que nunca.
María Inés Manrique
COPYRIGHT 2012
